JOKER: FOLIE À DEUX. Una segunda parte en línea con la primera.

Tras haber leído críticas bastante negativas sobre esta segunda entrega, fui a comprobarlo personalmente. Me encontré a un Joaquin Phoenix tan potente en su interpretación como en el primer Joker, y a una Lady Gaga con una solvencia extraordinaria representando el “à Deux” del título.

Será, quizás, porque el día anterior volví a ver la primera entrega, esta última me ha resonado en continuidad con esa ambigüedad que se inicia al final de la primera parte sobre la lucha interna, la oscilación entre quién es, auténticamente, el protagonista ¿Arthur o Joker?

El juego es continúo entre Arthur sin máscara y con máscara, el primero un miserable bondadoso que el sistema destroza, junto con su familia en ese intento de mostrar cómo la exclusión por razones económicas y también de enfermedad mental se “hereda”, pasa como la piedra nunca culminada de Sísifo de generación en generación. El segundo, Joker, la rabia, la ira y el odio que vuelca contra los que lo han despreciado, un alter ego que no se deja pisar y que por ello quita de en medio a todo aquel que abusa y menosprecia a los más débiles, representando la locura, el absurdo de llevar la ausencia de límites a sus últimas consecuencias.

Al igual que todos podemos ser en algún momento Arthur, también emerge un Joker que viene a vengarnos. ¿Y cuál es el auténtico? Es una cuestión que sobrevuela todo el filme, aunque yo me atrevería a decir que ambos.

Tendría alguna objeción que no deseo expresar para no reventar el guion a los que estáis leyendo este post, así que renunció a exponerlo.

Entiendo que la industria del cine busca dinero, no principalmente arte, por lo que el chasco en la taquilla, tal vez por haber calificado como un “musical” una pieza cinematográfica que, a mi juicio, no lo es, aunque sé que esto es controvertido; y si lo fuese revienta los musicales que se hayan podido hacer. La nueva entrega debe ser valorada y analizada al margen de los réditos crematísticos, ya que, si no, paradójicamente, estamos haciendo un llamamiento a Joker para que renazca aquí y ahora, bailando y cantando mientras cercena a los que con mala voluntad lo han hundido. Creo que la única manera de salir de dudas es viéndola y valorando que es lo relevante, con atención, ya que hay detalles que pueden pasar inadvertidos que dan todo su sentido a este Joker/Arthur.