por Ayer tuvo lugar en la librería Laie de Barcelona la presentación del libro “Educar para la vida” S.XXI. de Pepe Menéndez. En primer lugar, fue impresionante la cantidad de público que acudió, los cuales, deseosos de estar presentes, se encajaron como pudieron en el recinto preparado por la librería. Tras unas palabras del autor se inició un diálogo entre la periodista y exalumna Agnès Marquès y Begona Gash, directora de El Llindar. Para abrir paso a la intervención del público mediante una dinámica que, cómo no, había preparado Pepe para hacer más atractiva la presentación.
Escuchar a Pepe siempre es un placer por la convicción y la pasión con la que transmite su experiencia educativa y su dilatado conocimiento de escuelas de diversa índole -incluidas muchas de Latinoamérica-.
Dicho esto, y antes de iniciarme en la lectura de su último libro, no siempre coincido con los planteamientos que sostiene -he leído sus artículos y su obra anterior-. En el debate sobre la educación que, al menos, a nivel teórico -lo cual no implica que no contengan una vívida experiencia de los autores- se instaló hace bastantes años una polarización perjudicial entre la nueva escuela y la escuela tradicional.
Cuando se defiende una concepción en oposición a otra se tiende a menospreciar absolutamente una, a fin de ensalzar las virtudes de la que uno sostiene. Creo necesario destacar que Pepe Menéndez no ha caído en esta trampa que acaba ensuciándolo todo, y esto en sí mismo es un gran mérito: abstraerse de los errores del contexto y alzar la mirada más allá.
Solo por esta última atinada posición su nuevo libro hay que leerlo. Intuyo que no voy a coincidir plenamente en su planteamiento, porque la pasión que imprime a su trabajo le lleva a una cierta utopía, pero también es cierto que ésta no es más que un horizonte que motiva, mueve con el propósito de mejorar, y esta es la voluntad con la que Pepe nos regala esta última entrega.
Deseosa de iniciar la lectura, no quiero dejar de recordaros que en este blog hay una reflexión sobre la didáctica de la Filosofía que hice hace años y que podéis descargarla gratuitamente.
https://filosofiadelreconocimiento.com/2017/11/16/el-principe-destronado-el-liderazgo-del-profesor/
Que os sea estimulante, os haga replantearos aquello que damos por sentado y disfrutéis aprendiendo.
FILOSOFIA DEL RECONOCIMIENTO 
¡Qué maravilla leerte, Ana! Conozco el trabajo de Pepe Menéndez y coincido contigo: su capacidad para mantener la mirada amplia, sin caer en polarizaciones simplistas, es admirable. Es justo eso lo que le da tanto valor a su enfoque, que siempre es enriquecedor, aunque a veces no coincidamos plenamente con él. Estoy deseando leer su nuevo libro, sabiendo que, como bien dices, su pasión por la educación nos invita a soñar con un futuro mejor. Gracias por compartir tus impresiones de manera tan clara y estimulante. ¡Nos seguimos leyendo!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias! Hasta la próxima!
Me gustaLe gusta a 1 persona