Era inevitable. He tenido una discusión muy elevada de tono con Morfeo. Hace mucho tiempo que no asume su responsabilidad, y ayer llegué al límite. Su ausencia ha hecho estragos en mí: ojeras, cansancio, irritabilidad. No se puede ostentar un cargo porque quede bucólico y dejar a la gente a su suerte, al menos a
