Descreídos por los buenos augurios que se avecinan, rebuscamos la trampa y el cartón de esa realidad benévola. Ineptos ante treguas de semejante calibre nos invade la parestesia y una confusión mental que paraliza alguna posible respuesta.
DISQUISICIONES DESDE EL ABISMO
Descreídos por los buenos augurios que se avecinan, rebuscamos la trampa y el cartón de esa realidad benévola. Ineptos ante treguas de semejante calibre nos invade la parestesia y una confusión mental que paraliza alguna posible respuesta.