Dónde nos encontramos de frente y sin decirnos nada, dónde todo esta en silencio y nada se mueve. Ahí nos encontramos, entre medio de la duda y la decisión rápida. En ese lugar dónde todo se ve de blanco y negro, dónde los caminos y los mosaicos se chocan y se convierten en casillas de filas y columnas.
Al parecer nos vemos cerca, dónde las miradas se accidentan muy de vez en cuando, pero a la vez sabemos que estamos muy lejos, entre el “1” y el “8”, dónde la vista se encuentra limitada y se acorta horizontalmente entre la “a” y la “h”.
En ese lugar dónde cualquier perdida puede significar un dolor, dónde la estrategia, la rapidez y la lógica es lo que cuenta.
Ahí dónde las piezas y la trayectoria de las mismas son importantes. Ahí dónde luchamos y discutimos de…