El espacio recorrido –distinto al reseguido- se acompasa de un tiempo que transcurre inexorablemente al punto final. Ese tramo vital nunca es aséptico, por mucho que el lenguaje permita esta indiferencia.
DISQUISICIONES DESDE EL ABISMO
El espacio recorrido –distinto al reseguido- se acompasa de un tiempo que transcurre inexorablemente al punto final. Ese tramo vital nunca es aséptico, por mucho que el lenguaje permita esta indiferencia.