
Por lo visto, a algunos contradictores les resulta muy difícil no poner el grito en el cielo cuando uno insiste en que, ante la alternativa entre apoyar la pseudopolítica, por un lado, y, por el otro, abstenerse de hacerlo, ciertamente no faltan motivos en favor de lo segundo y, en cambio, sobran razones en contra de lo primero. El escándalo suele manifestarse bajo formas variopintas, las cuales, no obstante, con frecuencia coinciden en señalar que la presunta alternativa en verdad constituye un completo sofisma, porque también podría suceder que, en vez de «despotricar», uno diera por fin el paso de «postularse como candidato». Respondemos lo siguiente:
seguir leyendo en COMUNAS DEL LITORAL