Acaso sea la soledad de mármol infranqueable, que incapacita para anudar lazos que templen, esa ausencia de calor vital lo que precipite muertes biológicas ante vidas ya inertes. Un cenotafio que aguarda al desdichado como destino apropiado y propio, habiéndose desvanecido en el abismo de la nada, sin nadie, ni com-pasión alguna. Solo el transeunte anónimo, desbordando sensibilidad, posa una flor aislada en el sepulcro vacío.
Fotografía: https://es.dreamstime.com/photos-images/sepulcro-vac%C3%ADo.html