Contra el optimismo ingenuo

3 comentarios

Desnutrirnos de desafecto, ignorancia e indiferencia es semejante a horadar una concavidad destinada a ser una siniestra oquedad sin culminación posible. Un algo gestado para la vacuidad, cuyo horizonte es ser absorbido sin condescendencia, por súplicas o ruegos, hasta devenir aquello que, de entrada, condicionó y posibilitó su leve estar.

El tremebundo acto de asumirnos como siendos a los que, al contrario del optimismo sartriano, ni nos pertenece la existencia ni como Sartre pretendió el privilegio de forjar cierta esencia; como exceso, por ventura, un atisbo de esa naturaleza.

Plural: 3 comentarios en “Contra el optimismo ingenuo”

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s