Aquel que espera al otro en el barrizal fangoso de la ambigüedad, tal vez no halle a nadie dispuesto a sucumbir en el desatino infinito de lo dicho y actuado. Solo puede exigirse lo que se ofrece y da.
DISQUISICIONES DESDE EL ABISMO
Aquel que espera al otro en el barrizal fangoso de la ambigüedad, tal vez no halle a nadie dispuesto a sucumbir en el desatino infinito de lo dicho y actuado. Solo puede exigirse lo que se ofrece y da.