La memoria nos permite acumular recuerdos y con ellos construir un relato, más o menos consistente, de lo que ha sido y es nuestra vida. Una historia repleta de pequeños vacíos que rellenamos inconscientemente más con sentimientos que con hechos. Parece que, en realidad, nuestros recuerdos difícilmente son los acontecimientos tal y como sucedieron, sino
En momentos de recortes y bajas salariales implementados por Brasilia, un diputado sugiere que los pobres coman ‘cada dos días’ para reducir costes. Nunca está todo visto y oído, porque la capacidad de estar dispuestos y de cometer atrocidades de los humanos es inmensurable. Antes de proponer dar alimento “al ganado” cada dos días –porque
La confusión de la felicidad con la satisfacción es el engaño efímero que se comporta como un movimiento uniformemente acelerado. A medida que degustamos esa asociación interiorizamos la confusión y más anhelo tenemos de satisfacer necesidades –no básicas- con la convicción de que esa saciedad nos proporcionará felicidad. Así, la felicidad se convierte en “algo”
Un susurro suave fundido con la brisa, casi imperceptible, que parece repetir: “Nadie te va a oír” como si fuera un viejo oráculo maldito, ya satisfecho y en plena expansión. Un gesto elocuente y brusco que trunca la quietud y el mantra persecutorio. Busca desesperadamente voces diáfanas y reales con las que entrelazar su propia
Turquía amenaza con abrir sus fronteras a Europa para que pasen los tres millones de refugiados que tiene retenidos. ¿Alguien se ha preguntado por el estado de esas personas tras el gran pacto –por el que pagó, algo así como que les vendió el sobrante- al que llegó Europa para zafarse del problema? Vergüenza. Inhumanidad.
A propósito del veinticinco aniversario de la muerte de Freddie Mercury a causa de una bronco-neumonía sobrevenida por el virus del SIDA, desearía dedicar unas letras en memoria de las generaciones que sucumbieron a esta enfermedad simplemente por ignorancia. Por desconocimiento de la existencia del maldito virus contra el que aún, hoy en día, luchan
A medida que transcurren los años una se afana por intentar dejar a sus hijos en herencia el secreto de la vida y de la muerte. Ni pisos, ni depósitos rentables, ni ahorros considerables en una cuenta bancaria ¿Para qué? Esos bienes materiales solo nos tientan cuando tenemos accesos crematísticos por estimulaciones capitalistas; pero, después
El tiempo curte la sensibilidad del individuo haciéndolo menos susceptible de dejarse arrasar y perder la perspectiva más racional, en las ocasiones en que se requiere. Pero, también es cierto que determinadas habituaciones a formas de sufrimiento humanas, que le son del todo ajenas, le insensibilizan hasta umbrales que parecen convertir al individuo en un
Suena el teléfono. Una ONG de médicos me ruega colaboración para continuar asistiendo a las víctimas de los bombardeos y ataques de Alepo. Mi respuesta acongojada es que tendría posibilidades de ampliar la aportación cuando reciba la paga. Quedamos en telefonearnos a mediados de diciembre, colgamos. Suena el teléfono. Otra ONG en defensa de los
Los inmigrantes, absorbidos por la tierra de acogida, prefieren perder la identidad del colectivo del que procedían a ser escupidos. Nada causa más terror que la vuelta a la penuria, cuando ya se dejó atrás.