¿Cómo puede el mal causado por otro, y sufrido por uno, generar tanto dolor? Es como si un filibustero interior se afanara continuamente en retornar el veneno contra uno mismo, sin que nada sepamos de tal sortilegio. Y nos horada el dolor que nos han infringido, y nuestra reacción es como la defensa ante un
Etiqueta: inutilidad
Alternamos el sosiego con la acritud de la crítica para sobrellevar el mundo y sobrellevarnos. Pero, esta combinación de laxitud y potencia en el decir y hacer sobre todo, nunca genera la satisfacción de la coherencia, porque terminamos diluidos en la inutilidad que el sistema social engulle plácidamente.
Los que caen en saco roto son como “sísifos” despeñándose eternamente. Ningún esfuerzo, ni gesto, ni amago de resurgir será avistado.